19-02-2012, 17:47:31
Tengo que confesar que hace tiempo que Eduard Punset me ponía algo nervioso. Sus metáforas entusiastas, con frecuencia, me parecían excesivas y no respaldadas por los datos de los científicos a los que entrevistaba. Sus libros, cada vez más vacíos de contenido interesante.
Pero hoy he descubierto con estupefacción que defiende la acupuntura (en Muy Interesante) y que, en el pasado, ha entrevistado a personajes como Deepak Chopra o ¡Uri Geller! de forma laudatoria.
http://blogs.elcorreo.com/magonia/2010/0...gia-qi-su/
Ahora entiendo mejor el gato que le tienen escépticos y divulgadores como Schwarz o Gámez, que yo atribuía, al menos en parte, a cierta envidia profesional, dado que Punset es economista y político, no científico.
Estoy desolado. Pero rescato una frase genial de Schwarz, que podemos aplicar a nuestros queridos adversarios: "Si el periodista no es riguroso siempre, no es fiable nunca."
Léase este post. Merece mucho la pena:
http://charlatanes.blogspot.com/2010/05/...de-la.html
Me hago el propósito de no seguir más al divulgador más famoso de España... que resulta que no es divulgador ni nada.
Pero hoy he descubierto con estupefacción que defiende la acupuntura (en Muy Interesante) y que, en el pasado, ha entrevistado a personajes como Deepak Chopra o ¡Uri Geller! de forma laudatoria.
http://blogs.elcorreo.com/magonia/2010/0...gia-qi-su/
Ahora entiendo mejor el gato que le tienen escépticos y divulgadores como Schwarz o Gámez, que yo atribuía, al menos en parte, a cierta envidia profesional, dado que Punset es economista y político, no científico.
Estoy desolado. Pero rescato una frase genial de Schwarz, que podemos aplicar a nuestros queridos adversarios: "Si el periodista no es riguroso siempre, no es fiable nunca."
Léase este post. Merece mucho la pena:
http://charlatanes.blogspot.com/2010/05/...de-la.html
Me hago el propósito de no seguir más al divulgador más famoso de España... que resulta que no es divulgador ni nada.
[A los creyentes] les competerá difundir lo que otros han acuñado; ya que ningún hombre suelta y expande la mentira con tanta gracia como el que se la cree.